Predicaciones y Sermones Cristianos Qué Cambiará Tu Vida
Cuando Das Algo Dios Lo Multiplica – Pastor Alejandro Ruíz
Cuando das algo Dios lo multiplica
Juan 6:1-15
1 “Después de esto, Jesús fue al otro lado del mar de Galilea, el de Tiberias.
2 Y le seguía gran multitud, porque veían las señales que hacía en los enfermos.
3 Entonces subió Jesús a un monte, y se sentó allí con sus discípulos.
4 Y estaba cerca la pascua, la fiesta de los judíos.
5 Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él gran multitud, dijo a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman éstos?
6 Pero esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer.
7 Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no bastarían para que cada uno de ellos tomase un poco.
8 Uno de sus discípulos, Andrés, hermano de Simón Pedro, le dijo:
9 Aquí está un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; mas ¿qué es esto para tantos?
10 Entonces Jesús dijo: Haced recostar la gente. Y había mucha hierba en aquel lugar; y se recostaron como en número de cinco mil varones.
11 Y tomó Jesús aquellos panes, y habiendo dado gracias, los repartió entre los discípulos, y los discípulos entre los que estaban recostados; asimismo de los peces, cuanto querían.
12 Y cuando se hubieron saciado, dijo a sus discípulos: Recoged los pedazos que sobraron, para que no se pierda nada.
13 Recogieron, pues, y llenaron doce cestas de pedazos, que de los cinco panes de cebada sobraron a los que habían comido.
14 Aquellos hombres entonces, viendo la señal que Jesús había hecho, dijeron: Este verdaderamente es el profeta que había de venir al mundo.
15 Pero entendiendo Jesús que iban a venir para apoderarse de él y hacerle rey, volvió a retirarse al monte él solo.”
El Señor Jesucristo andaba predicando, sanando a enfermos, beneficiando a mucha gente, y gente se reunía para criticarlo, para avergonzarlo en público. Mucha gente lo seguía con diferentes motivos. Estaban en el mismo lugar pero tenían diferentes motivos.
Aquí habían tomado un tiempo para descansar y llegó una gran multitud para escuchar a Jesús para ver las señales y milagros y dice que eran cinco mil hombres.
Juan 6:5-7 dice: “Cuando alzó Jesús los ojos, y vio que había venido a él gran multitud, dijo a Felipe: ¿De dónde compraremos pan para que coman éstos? Pero esto decía para probarle; porque él sabía lo que había de hacer. Felipe le respondió: Doscientos denarios de pan no bastarían para que cada uno de ellos tomase un poco.” Se encuentra una gran multitud, más de cinco mil personas reunidas, ya era una hora avanzada, tenían hambre y el Señor Jesucristo alzó los ojos y vio una gran multitud. Y él preguntó de dónde comprarían pan para que ellos comieran y esto lo hacía para probarlos, quería ver el corazón y la fe de ellos.
Felipe sacó la cuenta. Un denario era el salario de un día. Eran como sesenta mil pesos y él dijo que si tuvieran esa cantidad no podían alimentar a esas personas. En ese momento había necesidad, estaba el Señor, los discípulos y la gente hambrienta.
Hoy en día también vivimos en tiempos de necesidad física y espiritual. Hay gran hambre de la palabra de Dios. Todos los días nos esforzamos por trabajar y estamos preocupados por la comida de la semana, de los gastos con los hijos y queremos saciar esa hambre física y mucha gente hasta dice: “Yo no tengo tiempo, no puedo ir a la iglesia porque necesito tener comida en la casa, si voy a la iglesia para mí sería como perder el tiempo.” Y lo ven como una mala inversión, dejan de ganar dinero si asisten a la iglesia, pero la gente no sabe que hay hambre de la palabra de Dios. Hay que preocuparnos por la comida, hay que trabajar por la comida, pero también hay que estar alimentados espiritualmente, darle la misma importancia.
Qué bueno que venimos a la iglesia, pero necesitamos alimentarnos todos los días en nuestra casa, preocuparnos por nuestros hijos para que ellos también estén alimentados espiritualmen...