Predicaciones y Sermones Cristianos Qué Cambiará Tu Vida
Para Tener Una Casa Bendecida Por Dios – Pastor Alejandro Ruíz
Para Tener Una Casa Bendecida Por Dios
Hechos 16:25-34
25 “Pero a medianoche, orando Pablo y Silas, cantaban himnos a Dios; y los presos los oían.26 Entonces sobrevino de repente un gran terremoto, de tal manera que los cimientos de la cárcel se sacudían; y al instante se abrieron todas las puertas, y las cadenas de todos se soltaron.
27 Despertando el carcelero, y viendo abiertas las puertas de la cárcel, sacó la espada y se iba a matar, pensando que los presos habían huido.
28 Mas Pablo clamó a gran voz, diciendo: No te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí.
29 El entonces, pidiendo luz, se precipitó adentro, y temblando, se postró a los pies de Pablo y de Silas;
30 y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?
31 Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.
32 Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa.
33 Y él, tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se bautizó él con todos los suyos.
34 Y llevándolos a su casa, les puso la mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios.”
Este es un pasaje muy conocido. Aquí alguien hace la pregunta: “Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?” Creo que muy pocas personas se han encontrado a alguien que le pregunte “¿Como puedo ser salvo?” Es muy raro, pero sí pasa.
Pablo y Silas estaban predicando la palabra de Dios y después fueron encarcelados. Fueron a la cárcel con inocencia y en vez de quejarse y amargarse empezaron a cantar a media noche y a orar. Estaban agradecidos de padecer por la causa de Cristo y lejos de deprimirse, predicaron el evangelio en la cárcel y vemos que hubo un terremoto, las puertas se abrieron y había una ley que si el preso se escapaba, el carcelero tenía que morir, entonces él cuando vio las puertas abiertas, pensó que ya se habían escapado y ya se iban a matar, pero le dijeron que no se hiciera ningún daño. Y dice la Biblia “y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?” Él preguntó por la salvación, tal vez los había escuchado cantar y testificar y el Espíritu Santo le guía a hacer esta pregunta y ellos dijeron: “Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.” Si Dios ha permitido que llegue salvación a nuestra vida, debemos estar agradecidos por quien nos habló de Cristo, esta persona tomó el tiempo, perdió la vergüenza, dejó algunos de sus quehaceres y nos habló de Cristo y los que somos salvos debemos compartir esa salvación.
Para tener una casa bendecida por Dios es importante que haya salvación en esa casa. Que sea salvo el papá, la mamá, los hijos. Dios quiere salvar a toda la familia. Tenemos la responsabilidad de hacer la lista de oración por toda la familia, tenemos que interceder por nuestros familiares, papá, mamá, hermanos, tíos, sobrinos, etc. Dios quiere que escuchen el evangelio. Nuestros familiares más que nadie deben estar escuchando el mensaje de salvación y es nuestra responsabilidad orar por ellos. Sabemos que hay muchas dificultades con la familia, tal vez hay rechazo, problemas pero sí podemos estar orando por ellos.
Cornelio hizo un banquete para que su familia escuchara el evangelio. Él no se limitó, hizo una tremenda barbacoa e invitó a su familia para que escucharan el evangelio, no para que bailaran o para que tomaran. Cornelio estaba preocupado para que su gente escuchara el evangelio.
Dios quiere que nuestra familia esté recibiendo el plan de salvación. Cada cristiano debe ganar almas cuando menos a una persona cada día, y en los horarios de ganar almas cada cristiano debe estar en esa reunión. Los cristianos maduros no se deben perder la hora de oración que se tiene como iglesia ni la reunión para ganar almas. No podemos seguir poniendo pretextos como que no tenemos tiempo, Dios nos ha dado suficiente tiempo para desenredarse de los compromisos y tener tiempo...