Predicaciones y Sermones Cristianos Qué Cambiará Tu Vida
Cuando Le Ayudamos El Enemigo – Pastor Arturo Muñoz
Cuando ayudamos al enemigo
1 Samuel 30:1-6
1 “Cuando David y sus hombres vinieron a Siclag al tercer día, los de Amalec habían invadido el Neguev y a Siclag, y habían asolado a Siclag y le habían prendido fuego.
2 Y se habían llevado cautivas a las mujeres y a todos los que estaban allí, desde el menor hasta el mayor; pero a nadie habían dado muerte, sino se los habían llevado al seguir su camino.
3 Vino, pues, David con los suyos a la ciudad, y he aquí que estaba quemada, y sus mujeres y sus hijos e hijas habían sido llevados cautivos.
4 Entonces David y la gente que con él estaba alzaron su voz y lloraron, hasta que les faltaron las fuerzas para llorar.
5 Las dos mujeres de David, Ahinoam jezreelita y Abigail la que fue mujer de Nabal el de Carmel, también eran cautivas.
6 Y David se angustió mucho, porque el pueblo hablaba de apedrearlo, pues todo el pueblo estaba en amargura de alma, cada uno por sus hijos y por sus hijas; mas David se fortaleció en Jehová su Dios.”
Había llegado un momento en donde a su jefe, a su líder estaban a punto de apedrearlo. El pueblo estaba tan enojado con David y hablaban no solo de aventarle una piedra sino de matarlo. ¿Qué había sucedido? En 1 Samuel 29:1 dice: “Los filisteos juntaron todas sus fuerzas en Afec, e Israel acampó junto a la fuente que está en Jezreel.” Los filisteos eran enemigos de Israel pero en este tiempo David y sus hombres se habían ido a refugiar con un rey que era el rey Aquis y dice el versículo 6 “Y Aquis llamó a David y le dijo: Vive Jehová, que tú has sido recto, y que me ha parecido bien tu salida y tu entrada en el campamento conmigo, y que ninguna cosa mala he hallado en ti desde el día que viniste a mí hasta hoy; mas a los ojos de los príncipes no agradas.” David estaba con el pueblo de los filisteos, en cierta manera David había encontrado refugio en Aquis, el rey de los filisteos pero el problema era que David estaba con el pueblo enemigo que salieron contra los hijos de Israel.
Dice 1 Samuel 29-3-4 “Y dijeron los príncipes de los filisteos: ¿Qué hacen aquí estos hebreos? Y Aquis respondió a los príncipes de los filisteos: ¿No es éste David, el siervo de Saúl rey de Israel, que ha estado conmigo por días y años, y no he hallado falta en él desde el día que se pasó a mí hasta hoy? Entonces los príncipes de los filisteos se enojaron contra él, y le dijeron: Despide a este hombre, para que se vuelva al lugar que le señalaste, y no venga con nosotros a la batalla, no sea que en la batalla se nos vuelva enemigo; porque ¿con qué cosa volvería mejor a la gracia de su señor que con las cabezas de estos hombres?” David estaba huyendo de Saul, él se fue con Aquis y los filisteos y ellos tenían guerra contra el pueblo de Israel y David se encuentra en una posición de ser fiel. Él siempre ha sido fiel y le dijo a Aquis que le quería ayudar pero los filisteos pensaron que no era una buena idea y cuando iban contra los israelitas le dijeron al rey que David no podía ir con ellos y que lo mandara de regreso. Entonces Aquis habló con David y le dijo que él confiaba en él pero sus príncipes no y que se tenía que regresar. David había dejado a su familia en una ciudad que se llamaba Siclag para ayudar a los filisteos a combatir con el pueblo de Israel.
Quiero hablarles precisamente de eso cuando ayudamos al enemigo ¿qué pasa cuando le ayudamos al enemigo? David ciertamente está en un tiempo en dónde está huyendo de Saúl, está refugiándose con el pueblo enemigo y ahora le estaba ayudando al enemigo para combatir contra Saúl. Que bueno que al final no les ayudó en la guerra. Imagínate a David yendo a la guerra y matando a su propia gente y amigos y quizás a Jonatán y al rey Saúl pero allí estaba David ayudando al enemigo y cuando nosotros comenzamos a huir de la presencia de Dios suceden muchas cosas malas. Cuando huimos de la presencia de Dios tomamos decisiones malas y lo que podemos ver:
1.