Toda Palabra
El don inefable
Aunque los sacerdotes de Jerusaln profesaban estar esperando el Mesas, quienes recibieron el anuncio de los ngeles fueron los pastores en los campos de Beln.
Aunque los sacerdotes de Jerusaln profesaban estar esperando el Mesas, quienes recibieron el anuncio de los ngeles fueron los pastores en los campos de Beln.