Todas las actividades tienen alguna clase de impacto en el ambiente, por ello es necesario ir hacia un equilibrio en donde este sea menor logrando una economía sustentable.

El ecommerce no es ajeno a esto y genera un impacto, principalmente en dos dimensiones: mayor emisión de CO2 y aumento de residuos.

Respecto del aumento de CO2 tiene que ver principalmente con la logística basada en vehículos con motores de combustión fósil, esto potenciado por la generalización de los envíos rápidos que generan mas viajes y menos paquetes por cada vehículo.

Del lado de los residuos, además de que el sobreconsumo aumenta la basura electrónica y en general así como el acortamiento de la vida útil de los bienes, nos encontramos con el excesivo embalaje que genera una gran cantidad de plástico y cartón que termina en la basura. En varias ciudades de Estados Unidos este tipo de basura ya significa el 30% de todos los residuos sólidos urbanos.